El kéfir es una bebida fermentada que se obtiene a partir de cultivos de bacterias y levaduras. Su origen se remonta a la antigua región del Cáucaso, y se ha consumido tradicionalmente en Europa del Este, Asia Central y algunas partes del Medio Oriente.
En la actualidad la Universidad Nacional de Hurlingham se encuentra estudiando esta bebida para poder brindarle a la comunidad de Hurlingham un alimento sano y nutritivo, además de derivados del mismo como puede ser el queso crema a base de leche de kéfir.
El proceso de fermentación del kéfir se lleva a cabo al agregar los gránulos de kéfir a la leche o agua —cabe destacar que el kéfir de agua y el de leche no son el mismo, si bien conservan sus beneficios—. Estos gránulos de kéfir, están compuestos por una combinación de microorganismos que son beneficiosos para la salud de la persona que los consume.
Durante la fermentación, los microorganismos presentes en los gránulos de kéfir transforman a leche en un probiótico. El mismo es una bebida ligeramente ácida de sabor y con una textura similar al yogur líquido.
Los probióticos son microorganismos vivos, como bacterias o levaduras beneficiosas, que se consumen para mejorar la salud intestinal y fortalecer el sistema inmunológico. Estos microorganismos actúan colonizando el tracto digestivo y compitiendo con bacterias dañinas, ayudando a equilibrar la flora intestinal y promoviendo una digestión saludable. Además, se ha demostrado que los probióticos tienen efectos positivos en la función inmunológica, la absorción de nutrientes y la prevención de enfermedades relacionadas con el intestino.
El kéfir se considera un alimento probiótico, ya que contiene una variedad de microorganismos beneficiosos para la salud intestinal. Se ha sugerido que el consumo regular de kéfir puede tener efectos positivos en la digestión, el sistema inmunológico y la salud en general.
Es importante remarcar que la UNAHUR le brinda gránulos de kéfir de manera gratuita a la comunidad de Hurlingham, además de conceder información para que los vecinos y las vecinas puedan realizar el proceso de obtención del probiótico en sus casas. Si bien las fechas de entrega no son siempre las mismas, las personas interesadas pueden consultar información al respecto vía mail a voluntariadokefirunahur@gmail.com o en Instagram en la cuenta @kefirsolidariounahur.
Además de su versión de leche, como se mencionó anteriormente, los gránulos de kéfir también se pueden utilizar para fermentar otros líquidos, como agua con azúcar, produciendo una bebida conocida como kéfir de agua. Esta variante no láctea es especialmente popular entre las personas que son intolerantes a la lactosa o siguen una dieta vegana.
Conocé más sobre esta investigación en el siguiente video: